Luis Mottola: “Estoy muy movilizado con este regreso al país”

“Mi corazón está alerta a todo lo que le está sucediendo. Es una vivencia maravillosa regresar para trabajar en mi país y reencontrarme con mucha gente muy querida después de tantos años”. Así, con estas palabras, Luis Mottola, actor argentino radicado en España hace más de dos décadas, sintetiza sus sentimientos frente a la propuesta de volver a trabajar en su patria.

La trastienda de su vuelta es la siguiente: Mottola –quien desde los años noventa fue un rostro conocido de televisión en éxitos como Los buscas, ¡Grande, Pa!, Chiquititas y Montaña rusa, y también una figura del teatro, con participación en clásicos universales como La tempestad, de Shakespeare, o en grandes obras nacionales como No hay que llorar, de Tito Cossa– fue invitado a protagonizar dos obras de teatro en el Palacio Libertad, como parte de Repatriados, propuesta que brinda a los espectadores la oportunidad de disfrutar del talento de artistas que se afincaron en otros países.

De esta forma, en agosto el público podrá ver al hoy actor consagrado en España en cine, teatro y televisión por partida doble. Del viernes 22 al domingo 24, protagonizará Gorila, la jaula humana, obra basada en Informe para una academia, de Franz Kafka, adaptada y dirigida por Edy Asenjo, una suerte de monólogo tragicómico que combina stand up, música, karaoke y momentos de gran carga emocional. Y el fin de semana siguiente, del viernes 29 al domingo 31, realizará tres funciones de El submarino, de María Carmen Barbosa y Miguel Falabella: adaptada y dirigida por Carlos Olalla, la obra es una comedia sobre las tensiones en una relación de pareja, y está protagonizada por Mottola junto con Arancha De Miguens.

De este momento tan especial, de su regreso al país y de los proyectos teatrales, habló el actor en una entrevista exclusiva.

¿Cómo te llegó la propuesta para volver a hacer teatro en Argentina?

Llegó a través de Valeria Ambrosio, quien dirige el Palacio Libertad, que, junto con Pablo Silva, programador del área de teatro, me proponen hacer la obra que justo yo había estrenado, Gorila, la jaula humana, con Edy Asenjo como director. Es un texto basado en un cuento de Kafka. Me ofrecieron para hacerla, puse manos a la obra, empecé a trabajar y la estrené en Santander, España, con mucho éxito, por suerte. El submarino ya viene en marcha desde antes, cada vez más afianzada en la cartelera madrileña. Y cuando llegó la propuesta de llevar ambas obras me pareció absolutamente maravilloso. Así empezó todo.

¿Qué nos podés anticipar de ambas propuestas?

Gorila, la jaula humana es una obra que me encanta y con la que trabajé mucho. Hago que el público se vaya reflexionando y habiendo pasado un buen rato. En España dura ochenta minutos: tengo que rebajarla, estamos trabajando en eso, porque son protocolos de teatro en Argentina, pero no va a dejar de tener calidad.

Con respecto a El submarino, fue escrita por una pareja de brasileños; estoy trabajando con la actriz Arancha de Miguens, y En España soy dirigido por Carlos Olaya, un actor bastante consolidado en ese país, que hace su primera dirección. Es una comedia donde aparecen muchas cosas de la relación de pareja. Aborda veinte años de tiempo de un matrimonio, con las idas y vueltas, las separaciones, las infidelidades, los silencios y todo lo que significa una relación en la que también está la confianza y la desconfianza, el aburrimiento, las dificultades y los sueños que persigue cada uno. Cuando están juntos, se aborrecen, y cuando se separan, se necesitan.

Una de las metas del centro cultural es invitar al país a artistas argentinos que viven en otros partes del mundo para presentar espectáculos. ¿Cómo te preparás para este regreso?

Sí, sé de la propuesta del Palacio Libertad. Estoy muy movilizado, porque trabajé mucho en la Argentina, pero ya pasó mucho tiempo y vuelvo por primera vez a hacer una obra. Seguramente se recuerde a Los buscas, con Pablo Echarri, donde yo tenía un personaje muy importante, y he pasado por muchas otras cosas en Argentina, series y teatro. Pero fueron otros tiempos, hoy estamos veintipico de años después reencontrándonos, así que el corazón está alerta a todo lo que le está sucediendo. Es una vivencia maravillosa regresar para trabajar en mi país y reencontrarme con mucha gente muy querida después de tantos años.

Tu trayectoria en Argentina estuvo signada por la participación en grandes ficciones. ¿Te gustaría volver a trabajar en proyectos nacionales?

Sí, he trabajado en varias ficciones con gente muy interesante. Me encantaría trabajar en otros proyectos, pero vamos por el paso a paso. Ojalá que mucha gente venga a verme y, si surgen más cosas, pues maravilloso, que la vida me sorprenda. Hay una canción que dice eso: “sorpresas te da la vida”. Yo tengo otra frase de cabecera: “todo lo que sucede, conviene”. Estaré alerta.